12 += 1 nociones lingüísticas sobre informática

Artículo publicado en 2025

El primer concepto es el acrónimo. Este se forma generalmente con el inicio de una palabra y el final de otra. El ejemplo que los abarca a todos es, por supuesto, la propia palabra informática, cuyo origen tal vez no te habías parado a pensar.

Otro ejemplo de compuesto acronímico es el bit. Además de significar binary digit, es el pasado del verbo morder en inglés. Así comienza una curiosa estirpe: 4 bits conforman un nibble (también escrito nybble) o mordisquito, mientras que 8 bits, el doble, se denominan byte en inglés, una expresión homófona de bite, o sea, mordisco.

Además, en arquitectura de computadoras, para referirse al número de bits que determinado componente gestiona como una unidad se habla de tamaño de la palabra o word, como podría ser 32 o 64 bits.

Agrupar bits tiene su historia… porque no es lo mismo juntarlos de manera binaria que decimal. ¿Por qué al comprar un DVD que en la carátula ponía 4,7 gigabytes o GB al usarlo en un ordenador con Windows las propiedades indicaban 4,37? Pues porque el vocablo preciso para llamar a estos últimos sería gibibytes y su sigla recomendada ahora es GiB, para distinguirlos.

Siglas hay muchas en el sector informático, por ejemplo, para los protocolos de red que ya mencioné. Ahora bien, encontraremos unas cuantas siglas con recursividad, es decir, donde una palabra consiste en las propias siglas, como el proyecto GNU que alude a GNU’s Not Unix. Algunas en su origen no presentaban esta peculiaridad, pero cambiaron su significado con el tiempo, caso de los lenguajes YAML o PHP.

Con respecto a desarrollar en PHP, por cierto, existe una extensión para VSCode que se llama Intelephense. Su nombre es un juego de palabras con la mascota de este lenguaje, ElePHPant, junto con una de las capacidades de esta herramienta, que consiste en la edición de código o IntelliSense (que a su vez suena casi como intelligence).

Es que la continuidad o cierto humor en los nombres es a veces otra característica en este ámbito. Dentro de los algoritmos de cifrado simétrico, por ejemplo, CHACHA20 es una variante de SALSA20.

De vez en cuando, a mí determinadas expresiones directamente me parecen simpáticas. Véase el caso de que los eventos en JavaScript burbujean (digamos que se expanden desde el elemento menor hacia los ancestros). Para saber si un evento hará eso, hay una propiedad booleana que se llama bubbles.

Por otro lado, en la jerga se utiliza un término de forma contraria a la esperada por alguien ajeno. Si un programador dice que algo es transparente para el usuario significa… ¡imperceptible! Esto es, que no lo notará.

Por su parte, si el comando “cat” en Linux concatena las líneas de un fichero mostrándolas por pantalla de la primera a la última (“Primera... Última”), si escribimos el comando al revés, “tac”, muestra el resultado en el orden opuesto (“Última... Primera”).

La polisemia encuentra el summum en el concepto de interfaz. ¡Casi todo es una interfaz! Cómo se comunican dos partes, lo que expone una parte para que se comuniquen con ella o el contrato que suscribieron elementos diversos que saben hacer las mismas acciones.

El comentario (que quizá temen algunos estudiantes, del que viven los medios sociales o que constituye una parte sustancial del periodismo) en programación documenta el código. Ahora bien, como sentenciaba un curso básico de C#: "No confíe nunca en los comentarios. Es posible que no reflejen el estado actual del código después de muchos cambios y actualizaciones".

Bonus: Podríamos pensar que algunos signos ortográficos como el punto y coma, los corchetes, las llaves y tildes varias tienen poco uso en general, porque extrapolamos su escasa frecuencia en nuestra literatura cotidiana. Sin embargo, el núcleo de su vida está en lugares como el código fuente, donde no solo aparecen solas sino en combinaciones inimaginadas (a las que realmente no cuesta tanto acostumbrarse).