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Entendiendo la asesoría empresarial: términos y diferencias

Artículo publicado en 2021 y revisado en 2023

Vi necesario compilar las diferencias entre diversos conceptos administrativos para discernir los departamentos de un negocio (bookkeeping vs tesorería vs contabilidad vs finanzas) o el papel básico de cada profesional (asesor vs consultor vs gestor).

Sobre unos gráficos está el borde de una calculadora, la punta de un bolígrafo y un clip para papeles

Minidiccionario de administración empresarial

Antes de nada, conviene que ciertas nociones estén claras.

Más vinculadas al derecho, existen varias áreas en las que una persona física o jurídica puede tener responsabilidad a mayores de la administrativa, como la penal (delito) o la civil (indemnizar al dañado). El derecho mercantil está especializado en las relaciones comerciales. Ya se han abordado en otros artículos los fundamentos de propiedad intelectual y licencias de uso.

Diferencia entre asesoría, consultoría, gestoría...

Para ayudar en estos aspectos se puede acudir a profesionales, cuyas denominaciones a menudo se intercambian. Una asesoría informa a partir de la legislación, una consultora desarrolla una solución puntual a determinado problema y una gestoría tramita. En España, los gestores administrativos han de estar colegiados y el subtipo concreto de los expertos contables en algunos países deben obtener una certificación como contador.

Por lo que entiendo, la gestión administrativa ofrece trámites que una persona física requiere, como lo relativo a la propiedad, el tráfico, una patente, la renta o la Seguridad Social. El gestor contable examina si lo que se registra cumple las normas contables y elabora informes, mientras que alguien con especialidad fiscal presenta ante las autoridades la documentación de los impuestos de sus clientes (como el IVA). Por su parte, si se necesita gestoría laboral, esta creará las nóminas. Con frecuencia una entidad puede prestar varios o todos estos servicios a sus clientes.

Hay ciertas tareas que no se suelen delegar. Por ejemplo, un freelance o autónomo genera sus facturas, añade gastos, realiza pagos y supervisa los cobros, es decir, hace las labores de un tenedor de libros (bookkeeper). Con el tiempo se contrata a un profesional como los anteriores o se subcontrata un asistente virtual.


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